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Una guitarra, una Voll Damm y tus ojos azules clavados en mí, recelosos desde las esquinas, buscándome a tientas, palpando el calor y el color de lo que me envuelve... no necesito nada más, me siento completo, despegado de todo y a la vez atado a ti, a tu frescura, tu aliento, tus ganas de vivir... tus acento en la comisura de tu boca, tus ansias por besarme y mis ganas de incendiarte un poco más esta noche el corazón, sofocarte luego con labios de hielo, abrazarte infinitamente, sentir entre mis manos la textura de tu pelo, ceder a la embestida del amor como cede la arena del desierto en la tormenta, hablar entre susurros, entre caricias, entre carcajadas... fundirme contigo y entrar en ti sin tocarte...
Esto es lo que quiero, mojar tus ilusiones con mis ojos tristes y arrancarte cada día una sonrisa.
Esto es lo que tengo, esto es lo que soy y te lo entrego.