Estoy calado

"y es que no hay nada más frágil que el equilibrio... no hay nada más débil que los buenos tiempos"

sólo para recordarme que las cosas pueden torcerse siempre cuando menos te lo esperas y sin motivo alguno, y que lo más difícil de todo no es saber estar preparado para cuando esto sucede sino saber buscar la manera de que nada más se tuerza e intentar enderezar lo que ya se torció en otras batallas.

En fin, estoy calado y no es culpa de nadie, es culpa mia... por no saber sobrellevar del todo bien la situación que me govierna en cada minuto de estas horas perdidas, de esta etapa rarisima que ahora mismo estoy ya sobrevolando... pero voy a regresar, voy a resistir y voy a volver a coger las riendas del tiempo que se me escapa, nadie ha dicho que vaya a ser fácil, pero lo voy a hacer.